- El nuevo informe "Dyslexic Dynamic" realizado por Made By Dyslexia y Talent Solutions, marca de ManpowerGroup, muestra cómo la dislexia puede ayudar a afrontar los retos de talento a los que se enfrentan las empresas actualmente.
- Hasta 1 de cada 5 trabajadores adultos del mundo son disléxicos pero las prácticas de contratación y evaluación no les permiten mostrar sus verdaderas fortalezas.
- El estudio muestra cómo las soft skills, que han adquirido un papel esencial en los lugares de trabajo digitalizados, se corresponden estrechamente con habilidades características de las personas con dislexia.
Madrid, 10 de agosto de 2021. - La escasez de talento se encuentra en el punto más álgido de los últimos 15 años. Para poder impulsar la recuperación económica post-covid es importante que las organizaciones recurran a una fuente de talento hasta ahora inexplorada y subestimada: el de las personas con dislexia. Así lo refleja un innovador informe elaborado por la organización benéfica global Made By Dyslexia y Talent Solutions, marca de ManpowerGroup, líder mundial en ayudar a las organizaciones a hacer frente a los desafíos en materia de empleabilidad. Estas organizaciones han unido fuerzas para desarrollar una mejor comprensión del pensamiento disléxico y animar a las empresas a valorar su importancia y ventajas frente a un escenario complejo y cambiante como el actual.
Se estima que en 2025 los humanos y las máquinas se repartirán el trabajo al 50%, una transición que se ha acelerado de forma exponencial debido a la pandemia y a la creciente necesidad por la digitalización y la automatización de los procesos. Esta tendencia se traduce en que dos de cada tres empresas (69%) no pueden encontrar las habilidades que necesitan en el mercado laboral actual y, por ello, recurren a nuevas formas de cubrir esta brecha.
En este sentido, el estudio ‘Dyslexic Dynamic’, basado en la encuesta más exhaustiva sobre trabajadores con dislexia, pone de manifiesto cómo algunas tareas que para personas con dislexia suelen suponer una mayor dificultad -como la ortografía, la lectura y la memorización de datos- se automatizarán, mientras que, por otro lado, las soft skills serán cada vez más valoradas por las organizaciones; la creatividad, la capacidad de resolución de problemas complejos y las habilidades interpersonales son algunos de los puntos fuertes entre personas con dislexia que más demandan las empresas en el escenario actual.
“Las empresas de hoy en día necesitan talento con dislexia. La dislexia no debe considerarse estrictamente como una dificultad de aprendizaje, sino como una forma diferente de pensar y ver el mundo; tenemos grandes especialidades y puntos fuertes que normalmente no se evalúan, pero las nuevas tecnologías podrían ofrecer una solución real", comenta Kate Griggs, fundadora y directora general de Made By Dyslexia. Existe un gran potencial y, sin embargo, la mayoría de las organizaciones no reconocen el talento disléxico cuando buscan nuevo personal. Más de cuatro de cada cinco (79%) disléxicos piensan que el proceso de contratación no les permite mostrar sus verdaderas habilidades y el 75% piensa que se les pone en desventaja. Además, más de la mitad (55%) de los profesionales responsables de contratación tienen un conocimiento escaso o nulo de las fortalezas de las personas con dislexia.
De esta forma, Tomas Chamorro-Premuzic, Chief Talent Scientist de ManpowerGroup, apunta a la necesidad de consolidar este cambio cultural en el que nos encontramos para mejorar el rendimiento en todos los ámbitos, especialmente importante en el proceso de contratación: “Las organizaciones están luchando para contratar a las personas que necesitan para impulsar la recuperación económica post-pandemia, mientras que al mismo tiempo, el talento diverso, -incluyendo a los que tienen dislexia- corre el riesgo de no ser tenido en cuenta. Ahora es el momento de reconsiderar la forma en que las empresas evalúan y miden las habilidades y el potencial para construir el mejor talento diverso".
Redefinir la dislexia o quedarse atrás
El informe ‘Dyslexic Dynamic’ revela que las principales habilidades que buscan las empresas se corresponden estrechamente con las habilidades de los pensadores disléxicos:
1. Responsabilidad, fiabilidad y disciplina
2. Resiliencia, tolerancia al estrés y adaptabilidad
3. Toma de iniciativa
4. Razonamiento, resolución de problemas
5. Liderazgo e influencia social
6. Pensamiento crítico y análisis
7. Colaboración y trabajo en equipo
8. Creatividad, originalidad
9. Aprendizaje activo y curiosidad
10. Adaptabilidad
Según apunta Kate Griggs: "El personal disléxico está bien posicionado y capacitado para brillar en los lugares de trabajo de hoy en día; los empresarios deben actuar en consecuencia para aprovechar el talento disléxico disponible. Esto es esencial ya que, para sobrevivir a este mundo laboral en constante evolución, los empresarios deben redefinir la dislexia y, para ello, deben hacerlo ahora o arriesgarse a quedarse atrás."
Para aquellos empresarios que quieran asegurarse de que no están poniendo barreras innecesarias a los candidatos disléxicos, Made By Dyslexia y Talent Solutions, marca de ManpowerGroup,ofrecen una serie de consejos a la hora de entrevistar potenciales empleados como ofrecer tiempo extra, salas tranquilas para los exámenes y preguntas claras; perdonar erratas y fallos en la ortografía ya que no son un reflejo del compromiso o la capacidad; no utilizar exámenes tradicionales para ayudarles a mostrar sus habilidades a través de distintas fórmulas; alentar a los candidatos a decir que son disléxicos y, por último, no insistir en una evaluación formal ya que una autodeclaración de dislexia debería ser suficiente.
Además, retratan la tecnología como un claro catalizador para aprovechar las habilidades de personas con dislexia y transformar la forma de evaluar a los candidatos. En este sentido, las dos organizaciones trabajan de forma conjunta para ver cómo la gamificación y las experiencias de usuario más cortas y atractivas pueden utilizarse en la evaluación para identificar la capacidad y eliminar los sesgos.